Thursday, December 17, 2009

Manipulación perversa

Como sabemos la publicidad manipula a la gente, y usa específicamente ese vocablo; "publicidad" que vino a reemplazar al de “propaganda”; el primero se refiere hacer público algo, “darlo a conocer”, lo que implica mostrarlo en su integridad, hablar de lo bueno y ventajoso tanto como de lo desventajoso o inconveniente de ese producto. Eso es informar o publicitar, en el estricto rigor. Sin embargo, si una empresa solo habla de lo bueno de un producto, lo que quiere es propagarlo y por tanto lo que hace es “propaganda”, no publicidad; por lo que vemos que desde ya nos miente o manipula haciéndonos creer que nos informa cuando en verdad, nos convence de que ese es el producto que necesitamos, lo que todas luces es una hipocresía y una manipulación.
Y es sabido que los publicistas son expertos en manipular la conciencia ciudadana aprovechando precisamente el estado sonambúlico de la conciencia colectiva y envían mensajes inconcientes que pasan inadvertidos y que exaltan deseos o pulsiones que viven bajo el umb
ral de la conciencia. Y para graficar esto tenemos esta propaganda ubicada en las intersecciones de las calles Irarrazaval c/ Av. Salvador.

Veamos que se publicita esta lencería por una modelo muy guapa y femenina. Pero si nos fijamos bien veremos que claramente se insinúa un pene en su entrepierna. Lo que está destinado a exaltar dos pulsiones; una en las mujeres: “si uso esa lencería poseeré pene” (y los privilegios del pene en nuestra sociedad). Y la lectura de los varones: la chica es guapísima y tiene pene (exaltando su parte homosexual). Y como todo esto es lectura que pasa bajo el umbral de la conciencia, el sujeto no se percata de la manipulación.
Así está la cosa en estos días, por ello no podemos ser ingenuos y pensar que todo anda bien, y que la sociedad nuestra es sana y está para desarrollarnos y ayudarnos a la realización. Es mejor sospechar.